Fundo en el año 2009 la escuela Om Padma Yoga, donde desarrollo labor docente en todas las disciplinas en las cuales me he formado y dedicado mi vida. Como eje transversal y fundamental: la filosofía del Yoga y su práctica, la danza y la música como una expresión de mi sentir más esencial.
Vivo y recibo formación en tres culturas muy diferentes, Uruguay, India y España, y es de ahí que proviene una visión ecléctica, que relativiza y aúna lo mejor de cada cultura.
Nací en Montevideo, Uruguay, donde me crié hasta los nueve años, momento en que mi familia se ve obligada al exilio por motivos políticos. Desde muy temprano sentí una luz que aún en los momentos más duros me guiaba. De familia anti dogma y atea, sin haber sido educada en fe de ningún tipo, sentí desde la niñez la intuición y consciencia de una energía no fácilmente definible. Esa intuición fue lo que me condujo al Yoga, a la búsqueda de un camino propio y de un equilibrio interior.
El Yoga apareció durante mi primer viaje a la India cuando tenía 17 años. Aquel viaje marcó un antes y un después, cambiando totalmente la mirada del mundo interno y del mundo externo. Un fortuito e intenso encuentro con tres sadhus, monjes ascetas, me abrió una puerta por donde sin dudarlo entré. Al volver a España comencé estudios de Yoga en la escuela Sivananda de Madrid.
Un año después de aquel primer viaje a India, mi madre cambia su residencia a Varanasi (Benarés) lugar donde vive desde hace ya veintiseis años. Varanasi se convirtió así en mi tercera ciudad, allí he vivido y crecido absorbiendo la cultura tradicional hindú. Recibo durante esa época clases individuales de Hatha Yoga del maestro Kameshwar Patak y formación en danza Kathak. La danza y la música clásica de India de alto carácter devocional y meditativo, junto con el profundo simbolismo de su lenguaje me llevaron a profundizar más en la filosofía del Yoga y sus textos fundamentales.
Realizo posteriormente una formación de cuatro años para profesores de Yoga, estudiando en la Federación Nacional de Yoga Sadhana, dirigida por Carlos Fiel. Profundizo en ese tiempo en la experiencia del Yoga, realizando un gran desarrollo personal. Interesada por la sanación estudio Yoga Terapéutico con Victor Morera.
Al terminar estos años de formación, en el año 2009, vuelvo a India por duodécima vez con más experiencia, formación y conocimiento de la cultura de India, lo cual me facilita introducirme en el mundo de los sadhus, con quienes convivo durante largo tiempo. Mantengo estrecha relación con el sadhu Swami Surendra Puri, sadhu perteneciente a la orden advaita Juna Akhara. Aprendo rituales y el recitado de mantras, prácticas del Vedanta, Bhakti Yoga y el Tantra.
Mientras me dedicaba a mi profesión, la danza, la práctica del Yoga fue compañera fundamental aportando estabilidad a todos los niveles. Me formé en Danza Kathak en Varanasi y Ahmedabad, y en Danza Contemporánea en Madrid, Londres y Nueva York, gracias a una beca del Ministerio de Cultura. Trabajé como bailarina durante doce años.